Ralph dio un rápido
paso adelante.
-Te dije a ti que lo hicieses.
¿Te dije que hicieses una lista con sus nombres!
-¿Cómo iba a hacerlo -gritó
Piggy indignado- yo solo? Esperaron dos minutos y se lanzaron al mar, se
metieron en el bosque, se fueron por todas partes. ¿Cómo iba a saber cuál era
cuál?
Ralph se mojó sus pálidos labios.
-¿Entonces no sabes cuántos
deberíamos estar aquí?
-¿Cómo iba a saberlo con todos
esos pequeños corriendo de un lado a otro como insectos? Y cuando volvisteis
vosotros tres, en cuanto dijiste <<hacer una hoguera>>, todos se
largaron y no pude...
-¡Ya basta! -dijo Ralph con
dureza, y le arrebató la caracola.
-Si no lo has hecho, pues no
lo has hecho.
-...luego subís aquí y me
birláis las gafas.
Jack se volvió hacia él.
-¡A callar!
-...y esos pequeños andaban
por ahí, donde está el fuego. ¿Cómo sabéis que no están por ahí todavía?
Piggy se levantó y señaló al
humo y las llamas. Se alzó entre los muchachos un murmullo que fue apagándose
poco a poco. Algo raro le ocurría a Piggy porque apenas podía respirar.
-Aquel peque -jadeó Piggy-, el
de la mancha en la cara; no le veo. ¿Dónde está?
El grupo estaba tan
callado como la muerte.
-El que hablaba de las
serpientes. Estaba allí abajo...
En árbol estalló en el fuego
como una bomba. Las trepadoras, como largas mechas, se alzaron por un momento
ante la vista, agonizaron y volvieron a caer. Los muchachos más pequeños
gritaron:
-¡Serpientes! ¡Serpientes!
¡Mira las serpientes!
Al oeste, olvidado, el sol
yacía a unos centímetros tan sólo sobre el mar. Los rostros estaban iluminados
de rojo desde abajo.
Piggy tropezó en una roca y a
ella se agarró con ambas manos.
-El chico con la mancha en
la... cara... ¿dónde está... ahora? Yo no le veo.
Los muchachos se miraron unos
a otros atemorizados, incrédulos.
-...¡dónde está ahora?
Ralph murmuró la respuesta
como avergonzado:
-A lo mejor volvió hacia el...
el...
Abajo, en el lado hostil de la
montaña, seguía el redoble de tambores.
Este fragmento es sacado del
libro “El señor de las moscas” de William Golding que nació en Newquay, Cornualles, en
1911 y crece en Marlborough, en cuya escuela era profesor de ciencias su padre.
En 1930 comienza a estudiar ciencias naturales en el Braneose College de Oxford
para complacer a su padre, pero dos años después cambia a los estudios de
literatura inglesa con el sueño de convertirse en un poeta al estilo de
Shakespeare. Gana un Premio Nobel de literatura y muere el 19 de junio de 1993
en Cornualles, Reino Unido.
Como
sabemos el libro está basado en una crítica social que es representada por unos
niños que implantan su propio sistema de gobierno sin manipulación del mundo
exterior, al principio los buenos sentimientos gobiernan pero más tarde la
anarquía llega y el egoísmo humano se hace presente. Este fragmento estaría
situado en el principio de la acción donde las primeras discusiones toman
lugar.
El
tema principal es son los conflictos entre los niños y el desorden de la
sociedad.
La
estructura externa está conformada por el dialogo entre los niños, la técnica
narrativa utilizada es la narrativa donde hay un narrador omnisciente que hace
aclaraciones y comentarios.
En
la línea 16 es un paralelismo donde se repiten las mismas palabras “si no lo
has hecho, pues no lo has dejado”, el autor utiliza este recurso para darle una
mayor importancia a las palabras
Las
líneas 4 y 10 crean una anáfora “¿Cómo
iba a?” que representaría el nerviosismo de Piggy
Hay otro paralelismo en las
líneas 40 y 44 donde se repite “¿Dónde está ahora?”.
El fragmento
podría dividirse en dos partes, la primera vendría a ser una pequeña discusión
escasa de introducción, en esta Ralph se enfada con Piggy ya que él no hiso la
lista de los niños en la lista gracias a la dispercion de ellos, a continuación
Piggy continua disculpándose pero Ralph se enfada y le manda a callar.
La segunda parte
del fragmento es el mayor problema que es producido por un incendio en la isla,
el pánico cunde y los niños comienzan a correr en todas direcciones, pero lo
peor es que un niño ha desaparecido (el niño de la mancha).
Esta obra está plena de simbolismos como: La cabeza del cerdo, que fue cazada por Jack, esta cabeza representa
el caos de la naturaleza humano incluyendo su forma más salvaje y oscura. Esta
cabeza va obteniendo una evolución de poder a medida de que los niños se
vuelven más salvajes
La caracola: este objeto también va teniendo una evolución de poder hasta
llegar a convertirse en el simbolismo del poder y la democracia, aunque su
verdadera función era darle el turno de hablar a quien la poseyera. Una vez que
el objeto llega a tener este símbolo va cayendo en una decadencia de autoridad
hasta que se rompe y ese momento es representado como la perdida de la
democracia e inicio del caos.
Las gafas: estas contienen variedad de significado, primero se puede ver
que son el signo de sensatez y de esperanza porque su poseedor era Piggy
En conclusión este fragmento es muy importante en el libro ya que se pueden
ver muchos de los aspectos principales de la obra como la irracionalidad y el
salvajismo, también es donde comienza un acto muy importante como lo es el
conflicto entre Ralph y Jack.